Hemos realizado una encuesta para detectar los “suspiros” más frecuentes en el entorno profesional y a cada una de ellas proponemos una solución. ¡A ver qué os parecen!
“No me siento valorado”
¿Hace cuánto que no te reúnes con tu supervisor para hablar de tu situación actual? Prepara un listado de tus responsabilidades y logros obtenidos a lo largo de estos últimos meses y habla con él/ella para que sea consciente de cómo te sientes y evaluar alternativas.
“Estoy aburrido”
¿Por qué estás aburrido? ¿Está en tus manos cambiar esta situación? Analiza tú día a día y valora si tienes proyección de futuro en tu empresa actual o si deberías de tantear oportunidades fuera.
“No me pagan lo suficiente”
¿Cuándo fue la última vez que te hicieron una revisión salarial? Tal vez sea el momento de hacerla o de por lo menos averiguar cuando será la próxima.
“Demasiado Micromanagement”
Algunos líderes hoy en día padecen este síndrome y parece que no confían en sus equipos aunque demuestren lo contrario. En estos casos lo mejor es ir al grano y hablar alto y claro. Dando ejemplos de tu pro actividad o de los resultados obtenidos podrán tranquilizar a tu supervisor.
“Pierde los papeles”
Mantén la calma y sal de ahí en cuanto tengas la ocasión. Lamentablemente esta situación se repite a menudo pero esto no significa que tengamos que tolerarlo.
“No puedo contar con mi jefe”
En estos casos lo mejor es analizar el escenario y evaluar cómo se puede enmendar. Tal vez tu jefe no es consciente de cómo te está afectando y puede que necesite tu ayuda.
“No tengo conciliación de la vida familiar y la vida laboral”
Cada vez son más las empresas que apuestan por ello en nuestro país (entre otras Repsol, IBM y Mercadona http://www.abc.es/familia-padres-hijos/20140103/abci-empresas-conciliadoras-201401021119.html)
Sin embargo es cierto que el camino es largo y todavía hay mucho por recorrer. En estos casos lo más apropiado es intentar evaluar las diferentes opciones y consultarlo con el departamento de RRHH.
“No ofrecen formación”
A raíz de la crisis nuestra sociedad está siendo más consciente de la necesidad y beneficios de la formación continua. Si en tu empresa actual no existe esta posibilidad pero encuentras algún curso que podría resultar interesante para tu departamento/empresa/área no dudes en comentarlo internamente y ver la posibilidad de realizarlos.
Recuerda que el cambio está en tus manos y cómo nos enseñaba un proverbio chino “No puedes guiar el viento, pero puedes cambiar la dirección de tus velas”.